La ceremonia

Por fiiiiiiiiiiiiiiiiin!! Como siempre digo... más vale tarde que nunca.... Aunque no lo creáis hasta ayer no me llegaron las fotos de la boda, y no quería poner las que me habían dejado las visitas porque resulta que ellos son mis lectores más asiduos, y creo que al menos merecen mi consideración y que les ponga fotillos nuevas. La verdad es que me gustaría decir: valió la pena la espera, pero no puedo porque la calidad de las fotos no es tanta, de hecho creo que las de Nani y Jorge salieron mejor. Al menos puedo decir que son muchas las fotos nuevas y que hay momentos en los que nadie había hecho.

Y aunque parezca increíble, aun estoy a la espera del vídeo de la boda... y bueno, aunque tal vez esté un poco mal que yo lo diga, los chilenos son un poco impresentables (sí sí, más incluso que los españoles) y cuando dicen media hora quieren decir 2 horas, cuando dicen 1 día en realidad es una semana, y cuando dicen 15 días en realidad son 2 meses y medio (como en este caso) y lo cachondo es que no se suelen tomar la molestia de llamar a informar de estas eventualidades y al final uno acaba teniendo que ponerse bastante pesado para que le hagan caso. En fin... De alguna forma me recuerda a cuando uno quiere darse de baja de una linea de teléfono o internet, supongo que la mayoría sabéis a que me refiero...

Así que, sin más dilación, voy a comenzar a hacer la crónica de la boda, tal y como lo prometí en su momento.

Llegué en un coche que no recuerdo muy bien de donde salió.... ah sí, era un radio-taxi! Bueno, el caso es que vine con Yanira, mi cuñada y testigo, y con Javiera, mi dama de honor ;-)


Luego entré con mi hermano al local. La ceremonia fue civil y la hicimos en el mismo sitio en el que luego fue el banquete.

Ariel me esperaba con Yanira y la jueza:

Y entonces entramos nosotros:

Aquí tenéis algunos momentos de la ceremonia:

Y para legalizar el asunto llegó el momento de firmar. Primero Ariel, luego yo, después los testigos Yanira y Germán que son los hermanos de Ariel, y por último la jueza del registro civil. Aquí no puedo dejar de mencionar que aunque Yanira hizo de mi testigo oficial, mi auténtica intención era que mi madrina de bodas fuera la Nana, aunque no fue posible porque no podía ser alguien extranjero... En fin, burocracia. Pero para mí en realidad es como si lo hubiera sido, y tal y como correspondía más tarde ocuparía su lugar ;-)

Tras las firmas llegó el momento de las alianzas. Para salirnos un poco de la norma decidimos descartar los anillos y nos decantamos por unas esclavas con nuestros nombres. Creo que Ariel aun se pregunta por qué no llevamos anillos... Sí cariño, es que no nos gustan!! ji ji ji.

Y como colofón final: EL BESO!!!

Y para acabar con los formalismos aquí nos entregan la libreta de familia (con nuestras mamis rondándonos):

Creo que por hoy ya es suficiente así que.... CONTINUARÁ.